via de la plata a su paso por allariz

Etapas del Camino Sanabrés

El Camino Sanabrés es una de las rutas jacobeas más interesantes, conectando la Vía de la Plata con Santiago de Compostela. A partir de A Gudiña, los peregrinos pueden elegir entre dos variantes: la ruta por Laza, más tradicional y montañosa, o la ruta por Verín, más larga pero con más servicios. A continuación, analizamos todas las etapas del Camino Sanabrés, desde A Gudiña y Ourense hasta Santiago de Compostela, con información sobre distancias, dificultad y puntos de interés en cada tramo.


Camino Sanabrés desde A Gudiña: Ruta por Laza

1. A Gudiña – Laza (34 km)

Dificultad: Media-Alta
Descripción: Esta es una de las etapas más exigentes del Camino Sanabrés. El recorrido atraviesa zonas montañosas, manteniéndose en altitudes superiores a los 1.000 metros, con varias subidas y bajadas pronunciadas. Sin embargo, los paisajes y la tranquilidad de la ruta hacen que el esfuerzo merezca la pena.
Qué ver: Montes de Ourense, ríos de aguas cristalinas y pequeñas aldeas gallegas.

2. Laza – Xunqueira de Ambía (32,8 km)

Dificultad: Media
Descripción: En esta jornada, el paisaje se torna más rural y boscoso. Se recorren senderos que atraviesan pequeños pueblos llenos de encanto.
Qué ver: Iglesia románica de Xunqueira de Ambía, ríos y paisajes naturales.

3. Xunqueira de Ambía – Ourense (22 km)

Dificultad: Media
Descripción: Comenzamos a acercarnos a la ciudad de Ourense, combinando tramos rurales con carreteras secundarias. La llegada a Ourense marca un cambio en la ruta, ya que es una de las ciudades más importantes del Camino Sanabrés.
Qué ver: Catedral de Ourense, Puente Romano y Termas de Outariz.

4. Ourense – San Cristovo de Cea (21,2 km)

Dificultad: Media
Descripción: La etapa comienza con una subida exigente tras salir de Ourense, pero el esfuerzo se ve recompensado con la llegada a San Cristovo de Cea, famoso por su Pan de Cea con denominación de origen.
Qué ver: Monasterio de Oseira, uno de los más importantes de Galicia.

5. San Cristovo de Cea – Castro Dozón (14,5 km)

Dificultad: Baja
Descripción: Etapa más corta y relajada, con caminos rodeados de bosques y paisajes típicos gallegos.
Qué ver: Monasterio de Oseira, rutas naturales.

6. Castro Dozón – Lalín (17 km)

Dificultad: Baja
Descripción: Un recorrido tranquilo, donde los peregrinos pueden disfrutar del paisaje rural gallego.
Qué ver: Iglesias románicas y campos agrícolas.

7. Lalín – Silleda (15,7 km)

Dificultad: Baja
Descripción: Tramo de transición con pequeñas aldeas y caminos rurales.
Qué ver: Pueblos con encanto y rutas fluviales.

8. Silleda – Ponte Ulla (19,7 km)

Dificultad: Baja
Descripción: Combinación de caminos de tierra y asfalto. La llegada a Ponte Ulla marca la última noche antes de Santiago.
Qué ver: Bosque de Trasfontao, río Ulla.

9. Ponte Ulla – Santiago de Compostela (20,9 km)

Dificultad: Baja
Descripción: Última etapa del Camino Sanabrés. A medida que nos acercamos a Santiago, el entorno se vuelve más urbano.
Qué ver: Catedral de Santiago, Plaza del Obradoiro.


Camino Sanabrés desde A Gudiña: Ruta por Verín

1. A Gudiña – Verín (40 km)

Dificultad: Media
Descripción: Más larga que la variante por Laza, pero con menos desnivel. La mayoría del recorrido es por carretera nacional.
Qué ver: Castillo de Monterrei, bodegas de vino de Monterrei.

2. Verín – Xinzo de Limia (34 km)

Dificultad: Media
Descripción: Etapa con paisajes abiertos, atravesando campos de cultivo y pequeñas aldeas.
Qué ver: Centro histórico de Xinzo de Limia.

3. Xinzo de Limia – Ourense (33 km)

Dificultad: Media
Descripción: Tramo final que conecta con Ourense, con una combinación de caminos rurales y carretera.
Qué ver: Termas de Ourense, casco histórico de la ciudad.


¿Qué Variante Elegir?

Si buscas una experiencia más montañosa, tranquila y con menor presencia de carreteras, la ruta por Laza es la mejor opción. Si prefieres un recorrido más accesible, con más servicios y menos desniveles, la ruta por Verín es la alternativa ideal.

Independientemente de la variante elegida, el Camino Sanabrés es una de las rutas jacobeas más auténticas, ofreciendo una experiencia única para los peregrinos que buscan llegar a Santiago de Compostela de una forma diferente.